Picadero Club de Campo de Madrid

REHABILITACIÓN DE PICADERO CUBIERTO:

ARQUITECTO AUTOR: FCO. BORJA PEÑA MORIENTES.
ARQUITECTOS COLABORADORES: ERNESTO SIERRA, XABIER ORTEGA AÑORGA, NAGORE URRUTIA DEL CAMPO, VIRGINIA LAÍNEZ, JAVIER MUÑOZ POSSE Y JULIO GOTOR VALCÁRCEL.
ARQUITECTOS TÉCNICOS: JOSE CARLOS ASENSIO Y SANDRA RODRIGUEZ GONZÁLEZ DE CANALES.
LOCALIZACIÓN: CARRETERA DE CASTILLA KILÓMETRO 2,4. MADRID
PROMOTOR: CLUB DE CAMPO VILLA DE MADRID S.A.
CONSTRUCTOR: FERROVIAL-AGROMÁN S.A.
FECHA FINAL DEL TRABAJO: OCTUBRE 2013- MARZO 2014.

El proyecto rehabilitación del antiguo picadero trata de recuperar la memoria del lugar, desarrollando una rehabilitación desde la economía y la racionalidad de medios, resaltando los valores de la propia edificación existente desde la capacidad del propio edificio de resolver la relación con su entorno y programa a través de su contundencia formal y constructiva.

Desarrollada esta sensibilidad frente al proyecto en primer lugar se procede a la eliminación de la fachada de amianto de 1963 nociva para la salud y al diseño de un nuevo cerramiento que además de contribuir a realzar los valores arquitectónicos, ambientales y paisajísticos de la edificación existente, trata de optimizar su comportamiento energético.

La nueva fachada se ha diseñado cuidadosamente teniendo muy en cuenta el imponente entorno natural en el que se ubica el actual picadero cubierto, rodeado de abundante vegetación y árboles de gran porte de hoja caduca. Desde el exterior el nuevo cerramiento se mimetiza con el entorno natural arbolado, a través de los juegos de transparencias, reflejos, luces y sombras que se filtran y proyectan a través de las dos pieles que lo componen:
UNA PRIMERA PIEL DE POLICARBONATO TRANSPARENTE sobre una subestructura de acero existente reutilizada, que garantiza la estanqueidad del conjunto y mejora la calidad higrotérmica del lugar, permitiendo la necesaria captación solar en los meses infra calentados de mayor uso de la instalación y la ventilación cruzada del picadero en los meses calurosos del año.
UNA SEGUNDA PIEL QUE ACTÚA COMO PROTECCIÓN FRENTE A LA RADIACIÓN SOLAR en los meses más calurosos y a su vez permite la entrada de la radiación solar en los meses infra calentados. Esta piel se compone de un entramado de rastreles de madera, inspirado en el arbolado perimetral, que sujeta los listones de madera tratados dispuestos horizontalmente que forman la celosía de protección solar cuidadosamente estudiada.

Con el objeto de definir la segunda piel de protección solar de madera se realizó un profundo Estudio de Optimización Bioclimática, de modo que se pudiera garantizar el máximo confort dentro del edificio, y se redujera al máximo su consumo energético. Como resultado de dicho estudio se pudieron extraer las siguientes CONCLUSIONES:
Condiciones del entorno:

Reducción de entrada de radiación solar directa en un 30% debido a la subestructura existente y a la existencia de aleros.
Reducción de radiación solar directa en un 70% en las fachadas SE y SO debido a la existencia de arbolado de gran porte de hoja caduca que sombrea todas estas fachadas durante los meses de abril a septiembre.
Protecciones frente al sol:
ORIENTACIÓN
PROPORCIÓN DE HUECO ENTRE RASTRELES A PROTEGER
Sureste
72.5%
Noreste
27.5%
Suroeste
100%
Noroeste
79.5%

– Como norma general y con el criterio principal de uso del edificio a lo largo de los meses infra-calentados, se hace imprescindible utilizar la captación solar para mejorar las condiciones de confort de uso. Por ello el espacio entre lamas de las fachadas NO, SE y SO es recomendable incrementarlo hasta 10 cm y reducir el empleo de tacos de madera de protección solar.
-La fachada más adecuada en lo que a captación de energía solar se refiere es la SE. El incremento del espaciado entre lamas en fachadas NO y SO va principalmente dirigido a incrementar la iluminación natural.
-La fachada NO dispone de mayor número de tacos de madera, puesto que en los meses en los que se requiere de captación de energía se encuentra en sombra, y en los meses de verano se requiere protección solar. Además, se trata de la fachada en la que el incremento de huecos tendría menor repercusión en la mejora de la iluminación natural.
Gracias al diseño del nuevo cerramiento se han podido obtener los siguientes RESULTADOS:

– Incremento en 4ºC aprox. la Tª interior del picadero en los meses de mayor uso (invierno).

– Reducción de consumo eléctrico en un 60%, mediante la mejora de la iluminación natural.

En el interior se ha desarrollado una rehabilitación selectiva y respetuosa eliminando simplemente todos aquellos impactos negativos que se habían ido introduciendo a lo largo del tiempo y que afectaban negativamente a la edificación original e introduciendo una serie de nuevas y pequeñas construcciones industrializadas construidas en chapa de acero inoxidable hacia el exterior y tablero contrachapado de madera laminada en su interior que completan la intervención y su programa. Contribuyendo a realzar y reactivar los valores intrínsecos de la edificación original a través de intervenciones puntuales como si de pequeñas operaciones de acupuntura se tratase.