Parque Cuchillitos de Tristán

Arquitecto Proyecto: Fernando Menis Colaboradores: Bruno Rodriguez Aparejador: Andrés Pedreño, Rafael Hernández Estructuras: Juan José Gallardo Instalaciones: Milian Associats, Ojellon Ingenieros, Nueva Terrain SL Otros Consultores: Arnoldo Santos (Biólogo), Fernando Ascanio (jardinería) Localización: Avenida de Los Principes s/n, Santa Cruz de Tenerife, SPAIN Fecha: 02/2007 Cliente: Cabildo de Tenerife Superficie: 32,500.00m² Empresa Constructora: ACCIONA TOPOGRAFÍA Y MATERIALIDAD La materia es una fuente de inspiración, especialmente cuando la topografía se convierte en el material sobre la que se trabaja directamente. El PARQUE DE CUCHILLITOS DE TRISTÁN toma su nombre de la finca en la que sitúa, entre los barrios de Tristán, Las Delicias, el Camino del Hierro y el Polígono de Ofra. En su frente Sur, separado por una vía de tráfico rodado, limita con terrenos de uso deportivo, a los que da continuidad dentro de la red de espacios libres. Destaca la topografía del terreno como característica física más importante, ya que se presentan desniveles importantes que llegan a alcanzar los 30 metros en los puntos más desfavorables, abriéndose el conjunto a la vista de Santa cruz de Tenerife, bajo el macizo de Anaga de fondo. La parcela se orienta en su sentido longitudinal en el sentido Este-Oeste, siendo los vientos dominantes los provenientes del Noreste. Este equipamiento urbano se encarga de dar servicios a varios barrios. El parque se dota de unas zonas de césped de unos 3000 metros cuadrados a modo de campus, como lugar de juegos infantiles, de zona de descanso, de espacio verde para pasear e incluso de espacio relajado que fomenta a la reflexión. Se trata de bolsas de distintos usos. Por un lado, los usos más intensos de juegos infantiles con columpios, toboganes, etc., (homologados por la Comunidad Europea) que garantizan la total seguridad de los usuarios más pequeños y prácticas de monopatín que, a modo de escultura, se ubica en el suelo con todas las curvas reglamentarias para la práctica de este deporte. Y, por otro lado, áreas más tranquilas pensadas para la tercera edad, dónde se contempla incluso una zona de petanca, así cómo áreas genéricas de paseo que conectan zonas altas de la ciudad con las zonas bajas de la ciudad de una forma suave (lo que se diferencia también del proyecto anterior). No se puede olvidar que la diferencia de cota del parque es de casi unos 30 metros, por lo que la suavidad del descenso o ascenso pretendido intenta hacer más practicable el parque en todos los sentidos y sobretodo superar las barreras físicas y permitir que las personas con alguna discapacidad también puedan disfrutar del mismo sin mayor problema. Se ha creado un diseño propio para el mobiliario del Parque bajo el nombre de SERIE AGUA. En esta proposición entra la idea de reciclaje: dar una nueva función a los materiales usados. En este caso, reutilizando tuberías de agua para las luminarias, las papeleras, los juegos infantiles… La vegetación también cambia con respecto al anterior proyecto: el nuevo proyecto introduce una zona de flora autóctona canaria, más adecuada a la zona de rocalla que en este momento queda del estado original del terreno primitivo, haciendo de toda esta zona un espacio de recuperación histórica de lo que antiguamente fue ese lugar. El resto del parque tendrá una plantación que intenta aglutinar familias vegetales de coincidencias en los momentos de floración para dar a cada una de estas islas, o bolsas, una característica natural y botánica especial. Zonas de aromas (con plantas olorosas tradicionales), zonas de color donde la flor es la protagonista y zonas más verdes que permanecen todo el año dando frescor y sombra para los juegos, sobre todo a los mayores. El medio físico en el que se ubica el parque y sus condiciones particulares, nos llevan a utilizar un trazado flexible, en el que se introducen unos objetivos de diseño condicionados por el medio que circunda el lugar. De esta forma no aparecen ejes principales y secundarios sino una red de paseos que permiten el recorrido a través del parque salvando las importantes diferencias de cota de una forma suave. La delimitación del parque está hecha por un camino peatonal a modo de senda que pierde las cualidades de acera, simplificando y potenciando la transición entre parque y ciudad. Este camino, al igual que los interiores del parque, varía en su anchura, aumentando en las confluencias con los accesos principales. Una red de caminos, con un criterio de geometría libre adaptada a la topografía, toma formas orgánicas que recuerdan a las coladas volcánicas, y permiten, dentro de su trazado, un recorrido por todo el parque en el que, de una forma suave, se salva la diferencia topográfica entre sus extremos. El tratamiento topográfico se convierte aquí en la herramienta fundamental. Se hecha de menos parques que destaquen el valor de la topografía como criterio de diseño, para tapar o destacar, enmarcar vistas y, en este caso, con la tarea concreta de enfrentarse a un salar tantos metros de desnivel. La materialidad de la topografía, a su vez, va marcando la dirección del proyecto y la ejecución, ya que, la realidad, está llena de sorpresas que hacen que sea aún más interesante. El territorio tiene otros factores que lo hacen impredecible, caótico (densidad, composición, estratos…). El trabajar en modelos abstractos de plastilina hace que el arquitecto se aproxime al proyecto con una actitud adecuada a una realidad virtual y sencilla que atiende solamente a unos cuantos factores que la gobiernan. Esto hace posible acometer un proyecto. Pero dado el primer paso, la realidad está moteada con millones de factores que la hacen mucho más difícil pero, a la vez, más interesante. En el caso de Cuchillitos al hacer el movimiento de tierras se encontraron unas cuevas que dieron un nuevo enfoque al proyecto. De esta manera el parque tiene un proyecto topográfico en su globalidad, pero luego, los distintos rincones, se diseñan en concreto para cada uno de sus usos, intentando sorprender al paseante en cada lugar. Acoge una demanda para todos los rangos de edades y prácticas deportivas al aire libre. Se utiliza vegetación autóctona pero dando un contrapunto a la aridez de la zona. En lo que respecta al carácter general del parque, se considera importante que suponga un contrapunto a la aridez de la zona de emplazamiento. Por ello, se trata de obtener un predominio de zona verde arbolada, con algunos espacios libres en aquellos lugares en que la nueva topografía permite aislarse del entorno. Igualmente, se trata de dar flexibilidad al esquema, lo que se consigue con el tratamiento orgánico de los paseos y zonas estanciales, deportivas y de juegos. Se mantienen elementos preexistentes, como el mirador, desde el que se obtienen importantes vistas de los alrededores, integrando su acceso a la red de caminos que recorren el parque. Es como si la naturaleza se hubiese aliado con el hombre para tenderle una escalera y señalarle un lugar. La vegetación con el mirador como cabeza recuerdan a un cometa con su estela y en ese sentido se le da fuerza al diseño paisajístico En el diseño de un parque, a veces, sólo el hecho de modificar la topografía, se convierte en una herramienta poderosa con la se puede extraer el potencial de un emplazamiento, para convertirlo en un lugar especial. Incluso cuando existe un alto grado de tecnificación, una pequeña intervención topográfica sirve para construir un estadio.     Park Cuchillitos Matter is a source of inspiration, especially when topography turns into the matter one uses directly for his work. Park Cuchillitos has a particular topography with differences going up to 30 m in its most difficult points and opens over the City of Santa Cruz with the image of the Mountain Anaga and the Atlantic as the main elements of the view. There was used a plastiline model for the project which needed much more details models during the works given the difficult character of the area: different heights, rocky ground, caves. The Park has its maximum lengths on the East-West axis. Just after entering the Park one can find an wide grass area with the aspect of a green amphitheater (aprox 3000 m2); this is an area for playing, resting or meditation. Afterwards there are also other areas with specific uses: playground for children, area where old people can do exercise, skate area and the pathways with a design which invites you to give a long walk which ends up with a big terrace where the city and the overall of the park can be seen. The topography of the area determined the design of the pathways which try to lower the differences of the ground and make easier the walk. There are only few benches; these are sculpted in stone; still, the big rocks which limit the different volumes and areas inside the Park have sometimes and can be used as benches. Working with models gives to the architect the opportunity to approximate properly to the project but once the project begins to be constructed there are always surprises which can determine new decisions and dramatic changes. From this point of view the Park had an important rate of unpredictability; once the earth was removed, some natural caves were discovered under the rocky ground. This new factor produced new uses and areas inside the Park; the caves were integrated to the project using specific plants for dark and humid areas and making possible to be visited. The Park uses flora from the Canarian Islands adapted to arid climate so that the watering can be minimal. On the other hand the plants, trees and flowers were chosen so that there are green areas during the whole year while flowers were mixed in function of the colors and the flavors. For instance, the fence all around the Park, made of iron bars used normally for the foundations is covered with roses of 2 colors and jasmine which turns it into an aromatic fence which wants to strike and attract the visitor with its rough appearance and then to welcome him with the flavors of the flowers going up and around the fence.   Galería:

Dibujos: